Pepe Aguilar es todo sobre tradición, orgullo mexicano y familia, y eso es exactamente lo que destaca en su gira Jaripeo Hasta Los Huesos.
Con actuaciones consecutivas de los miembros de la dinastía Aguilar, incluidos Antonio Aguilar Jr. (hermano de Pepe) y Leonardo y Ángela Aguilar (hijos de Pepe), el espectáculo es un homenaje al gran don Antonio Aguilar, quien fue pionero en el show estilo jaripeo en los años 60 junto a la cantante y actriz Flor Silvestre, su esposa y la madre de Pepe y Antonio Jr.
“Antonio era un hombre visionario”, dijo Pepe sobre su padre el viernes (5 de julio) durante la parada de la gira en el Allstate Arena en Chicago. “Traer a mi familia y cultura así es de la mejor manera. No lo hago por dinero, es en honor a mis papás. Estoy orgulloso de mi cultura”.
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Pepe y su hijo Leonardo rindieron además un homenaje a don Antonio cantando “Bandido de amores”, su colaboración con otra difunta leyenda, Joan Sebastian, originalmente grabada hace más de 30 años. La nueva versión, incluida en Soy Como Quiero Ser de Leonardo, un álbum tributo a Joan Sebastian, recientemente alcanzó el No. 1 en la lista Regional Mexican Airplay de Billboard (con fecha del 6 de julio).
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Antes de cantarla junto a Leonardo, Pepe explicó cómo surgió la colaboración original. “Mi papá y Joan no se llevaban”, dijo cándidamente. “Pero yo admiraba a Joan y pues Antonio era mi papá y yo los hice que se juntaran por una canción. Había que juntarlos. Treinta años después la grabo con mi hijo para su álbum homenaje a Joan y gracias a ustedes es No. 1 a nivel nacional”.
Leonardo y Antonio Jr. realizó cada uno un set de aproximadamente 30 minutos antes de que Ángela subiera al escenario ante un público eufórico montando un majestuoso caballo blanco mientras lucía un hermoso vestido largo negro adornado con flores rosas, naranjas y amarillas. Cantó “Qué agonía” y la favorita de los fans “Dime cómo quieres”, su colaboración con su recientemente confirmado novio Christian Nodal. “Te extraño, mi amor”, dijo Ángela en medio de la canción.
Inspirado en el Día de Muertos de México, el espectáculo de tres horas — con un escenario estilo 360 lleno de altares, catrinas que cobran vida y colorida artesanía mexicana — presenta a los cuatro artistas cantando mientras montan a caballo (una tarea que no es fácil) y charros que literalmente arriesgan sus vidas montando toros. En un momento, uno de los vaqueros mexicanos fue pateado por el toro que montaba para una competencia y tuvo que ser sacado en camilla. Pepe aseguró a los asistentes al concierto que éste estaba “bien”, y añadió que “Bendito sea Dios no pasó nada y seguimos con el espectáculo”.
Pepe fue el último en subir al escenario y lo hizo en un recinto lleno de familias multigeneracionales que aplaudieron su compromiso de poner la música, la cultura y la tradición mexicanas al frente de sus espectáculos. Sus hijos, que habían actuado con él, observaban a su padre desde lejos con admiración. “Prometo traerles un espectáculo diferente cada año si me lo permiten”, declaró Pepe.
Tras un segundo show en Chicago el sábado (6 de julio), la gira Jaripeo Hasta Los Huesos continúa con dos fechas consecutivas en Los Ángeles, el 13 y 14 de julio.